En esta nueva sección nostalgia, queremos recuperar las cosas de la infancia que nos marcaron, y hemos decidido estos dos casos que creo que en su día fueron muy populares.
En principio recordaremos el moco de elefante que se decía hace años y las madres se asustaban, además lo que más me gustaba es que iba dentro de una especie de contenedor tenía su encanto ya cuando lo comprabas era un juguete transgresor que o lo defendías o lo odiabas yo soy de los que lo defendía, pese a que acabaras jugando con él en el suelo y llenándose de todo desde piedras pelusas y a ti te daba igual, y seguías y bajabas a la calle y se pegaban mas piedras y era muy útil, porque era como una especie de aspirador se pegaba todo yo tenía la manía después de limpiarlo.
Con ese color que llamaba la atención verde fosforito ya te poseía para que hicieras cosas eras como un extraterrestre, yo lo pasaba por los cristales después te lo ponías en la mano royo como si fuera una peli de alienígenas de los años 80 te estuviese comiendo, y por último el olor era raro que yo tengo la teoría que he terminado así de enfermo en frikez por todos los olores que pasaban en mi infancia desde blandi blup, pegamento y medio, plastidecors, rotuladores, tipex, sin darse cuenta nuestros padres estaban haciendo de camellos comprando olores nuevos para darnos un nuevo chute.
Y ahora vamos hablar de la mano loca, era parecido al blandi blub en una cosa que las 2 se llenaban de mierda con facilidad, la mano loca tenía varias utilidades que querías robarle el examen al que tenias delante sacabas la mano loca se pegaba en el papel y ya era tuyo, pero lo que fastidiaba era cuando se te quedaba enganchada en un techo muy alto a mi me paso varias veces y hay deben seguir me acuerdo cuando las regalaba phoskitos que junto como una especie de matriculas originales y los cables que se iluminaban en la oscuridad fueron grandes regalos
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